Tras ocho años juntos María y Raúl tenían claro que querían celebrar su boda a lo grande organizando un buen fiestón para sus familiares, amigos y para ellos mismos, con el único objetivo de disfrutar al máximo, celebrar el amor y los reencuentros bonitos y bailar como si no hubiera un mañana. Como buena amante del diseño, la organización y la decoración María tenía claras muchas ideas que rondaban en su cabeza desde siempre y encontrar a Julieta in love y Decosureventos fue una bendita casualidad. Juntos conseguimos crear un espacio lleno de armonía y hacer brillar, más si cabe, ese convento de estilo gótico-mudéjar que esa noche lucía más espectacular que nunca. Cada detalle y cada rincón estaban organizados con mucho mimo sin restar protagonismo al Convento y a su esencia. Algo que tenían muy claro los novios es que como buenos amantes de la buena música, las flores y la iluminación serían los ejes principales de los que partir, y a raíz de ahí, que fluyera todo lo demás.

María: “No miento si digo que organizar nuestra boda ha sido una experiencia absolutamente mágica y emocionante a partes iguales, la cual hemos disfrutado mucho y que nos ha brindado la oportunidad de conocer gente a la que le apasiona su trabajo e incluso nos ha regalado grandes personas que sumamos a nuestra lista de amigos para siempre. Que todo saliera a la perfección fue gracias al trabajo en equipo de un gran número de profesionales que tuvimos el placer de tener cerca y a la predisposición de todos nuestros seres queridos de pasarlo fenomenal, deteniendo el tiempo por un instante esa bonita noche de verano. Fuimos inmensamente afortunados de poder juntar a tanta gente que nos quiere en un mismo espacio y por supuesto, tanto para Raúl como para mí nuestro 10 de agosto quedará guardado con hilo dorado en el cuaderno de nuestra memoria por siempre”.